Laura Arroyo G.
Hace meses vemos con alarma el accionar violento y fascista de movimientos políticos contra sus adversarios. Desde el acoso callejero, hasta impedir que se desarrollen actividades como las presentaciones de libros, vemos acciones vergonzosas ocurrir con discursos de odio. Sin embargo, lo que más alarma es que parecemos estar totalmente desprotegidos frente a este accionar fascista.