Recordamos para conmemorar una fecha que nos da cuenta de un hecho positivo en nuestras vidas, pero recordamos también para no olvidar hechos infaustos que no deben repetirse. Este es el caso del cinco de abril de 1992 cuando se dio un golpe de Estado, rompiendo el orden constitucional, para instaurar una dictadura corrupta y genocida, cuyos responsables, Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos, derrumbados de su poder mafioso por la fuerza democrática de la ciudadanía, felizmente ya han sido condenados por sus crímenes y se encuentran purgando prisión.
