La Hidrovía Amazónica, un proyecto inviable
Ismael Vega Díaz- Director CAAAP
Tendría graves impactos en la vida de los pueblos indígenas y ecosistemas amazónicos
“El río es un ser vivo, por ejemplo hablar simplemente de una cocha que parece que no corre, pero esa cocha tiene vida porque tiene ojos de agua que le mantienen…no tenemos información básica sobre qué es hidrovías, qué es lo que va pasar cuando se draguen los ríos…no tenemos seguridad si vamos a seguir teniendo nuestros peces para comer y si no es así estarían atentando contra nuestra vida alimentaria y para nosotros tiene importancia los seres sagrados que viven bajo el agua y pido al Estado que respete a los ríos y a los seres vivientes que viven debajo del agua” (Rusbel Castornoque, sabio y Líder del Pueblo Kukama)
Si el Estado escuchara con respeto y con una auténtica perspectiva intercultural a los pueblos indígenas amazónicos, no seguiría insistiendo en la ejecución del megaproyecto Hidrovía Amazónica como un proyecto prioritario para el desarrollo del país. Hace rato que lo hubiera sacado de su lista de proyectos incluidos en el Plan Nacional de Competitividad y Productividad.
A todas luces, la Hidrovía Amazónica es una obra absurda si se considera que ni la empresa china COHIDRO ni el gobierno tienen un conocimiento claro y real sobre el comportamiento de los ríos que serían impactados por el dragado (remover y excavar) de los trece puntos conocidos como “mal pasos”.
El gobierno afirma que se va a dragar unos metros, medio kilómetro o más, cuando el nivel de los ríos lo permita. Pero no tiene idea de lo que pasará con los ríos cuando nuevamente suban de nivel (creciente) y vuelva a arrastrar toneladas de arena y sedimentos, produciendo sin duda, cambios importantes en el curso de los ríos, en la pesca, las formas de vida y la alimentación de los pueblos indígenas, ribereños y las ciudades que serían afectados. Hay que tener en cuenta que el 90% de los indígenas y ribereños y el 70% en las ciudades de Loreto se alimentan de pescado1 .
Sin embargo, la preocupación de los pueblos indígenas va más allá de la calidad del agua y de los peces, que son su fuente principal de alimentación; sus temores también tienen que ver con su cosmovisión pues para ellos, en los ríos no solo hay flora y fauna importante para su subsistencia, sino que también son habitados por seres que le dan significado y orden al mundo de los Kukama Kukamiria. El dragado también los impactaría seriamente desde el punto de vista espiritual y cultural.
Para ellos en el mundo del agua viven espíritus como los bufeos, las sirenas y los yacurunas2 y todos viven en ciudades acuáticas de las que salen eventualmente para visitar el mundo de la tierra. Además, en los ríos habitan la L’Ipira o madre/dueña del agua de los peces, la Puruhua o serpiente, la Raya mama o pez raya gigante y la Charapa mama o tortuga gigante parecida a una isla. Todos estos seres deciden cuestiones como el nivel de agua de los ríos y son capaces de inundar embarcaciones creando remolinos y llevándose a las profundidades del río a hombres, mujeres y niños. Las referencias sobre los seres acuáticos en la mitología de este pueblo son muchas, incluso el pueblo Kukama se define como proveniente del río3. Para ellos, el río es parte de ellos y es sagrado en su totalidad y eso incluye a las zonas que COHIDRO y el Estado definen como “malos pasos”4
Para el pueblo Shipibo-Conibo de Ucayali, que también sería afectado por este megaproyecto, el río también tiene un papel determinante en sus vidas y está relacionado con las transformaciones que tiene el río anualmente en época de estiaje y en época de lluvias5. El conocimiento del comportamiento del río Ucayali, en relación con el aumento y disminución de su caudal, motivan en este pueblo preocupaciones sobre lo que podría pasar si se lleva a cabo el proyecto Hidrovía Amazónica. Para los y las Shipibo –Conibo, las madres del río, se fastidian con el ruido y con presencias extrañas. Este fastidio causa que se muevan de su hábitat para otros lugares. Además este desplazamiento tiene un efecto directo sobre las zonas abandonadas por ella: también los peces (de la que es dueña) se van con la madre.
“Cuando le empiecen a dragar, creo que va a ser bien peligroso […] Sí, pues, se va a mover [la madre del río]” “Se va a ir a otro sitio [la madre]. Donde no le han cavado ahí va a irse. Eso es cierto. Es cierto, y cuando ya sale eso ya se puede secar más el río” Pobladora de la Comunidad Libertador (Pobladoras Shipibo –Conibo, de la comunidad Libertador)6
Para las instituciones especializadas como Wildlife Conservation Society – WCS y la Universidad de Tecnología e Ingeniería (UTEC), la preocupación también se enfoca sobre el impacto en el ecosistema amazónico y su biodiversidad. Ellas han realizado estudios sobre los ríos que serían afectados por el Proyecto Hidrovía Amazónica y sostienen que el dragado, principal trabajo del proyecto, afectará la dinámica hidrológica de los ríos y provocaría la re-suspensión (elevación) de las sustancias tóxicas como metales pesados generados por los derrames de petróleo de que han asolado los ríos amazónicos durante los últimos 40 años. Estas sustancias, puestas en circulación, se podrían acumular en los tejidos de millones de peces y otros organismos acuáticos, produciéndose el envenenamiento de los mismos, con el posterior efecto de contaminación de la población indígena y no indígena que consume diariamente estas especies, por lo que habría una enorme vulneración a la seguridad alimentaria de todas las poblaciones –indígenas y no indígenas- que dependen de los ríos como fuente de vida.
A partir de estas constataciones y amenazas contra la vida de los 14 pueblos indígenas y los ríos Huallaga, Amazonas, Marañón y Ucayali que serían gravemente impactados por el del proyecto Hidrovía Amazónica, las organizaciones indígenas ACODECOSPAT y ORPIO de Loreto, así como ORAU, FECONAU y COSHICOX de Ucayali, ya se han pronunciado exigiendo su cancelación y la creación de un espacio de diálogo que encuentre alternativas para mejorar la navegabilidad de los ríos, sin poner en peligro la vida y los derechos de los pueblos y de los ríos.
-----------------------
1 Álvarez, L. y S. Ríos. 2009. Viabilidad económica de la pesca artesanal en el departamento de Loreto. Avances Económicos No. 13. Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana. Iquitos.
2 La palabra yacuruna deriva del quechua yacu (agua) y runa (gente): se refiere a los seres que viven debajo el agua.
3 En el mito “Cómo apareció el pueblo Kukama”, narrado por Víctor Canayo (QUISCA PRODUCCIONES, WAINAKANA KAMATAWARAKANA Y RADIO UCAMARA, 2016: 41-42) se explica que este pueblo tiene como pareja fundacional al hijo producto de la unión entre un joven boa y una mujer humana y a la hija de una mujer lagarta con un joven humano, por eso los recién nacidos huelen a pez.
4 Informe de investigación “LOS IMPACTOS DEL PROYECTO HIDROVIA AMAZONICA EN LA RELACION ENTRE EL PUEBLO KUKAMA KUKAMIRIA Y SU TERRITORIO Y SOBRE SU INTEGRIDAD Y SUPERVIVENCIA”. Consultora Rosario Rodriguez. CAAAP 2019.
5 A pesar de las diferencias aún mayores al interior de cada época, según lo describieron varios autores (Tournon, 2002). Queda pendiente rescatar tales diferencias que ayude a complejizar la explicación que aquí se da de manera más panorámica.
6 Informe de investigación “LOS IMPACTOS SOCIOCULTURALES DEL PROYECTO HIDROVÍA AMAZÓNICA EN EL PUEBLO SHIPIBO-CONIBO”: Consultor Miguel Valderrama. CAAAP 2019.
Comentarios
César Alipio Ba... (no verificado)
Jue, 10/29/2020 - 12:16
Enlace permanente
LO NATURAL, COMO EL ECOSISTEMA, NO SE CIVILIZA: SE PROTEGE.
Añadir nuevo comentario