Alejandra Dinegro M.
El futuro de un joven peruano sigue dependiendo, en gran medida, de dónde nació, de cuánto gana su familia y de la calidad —o precariedad— de las instituciones que lo rodean: el 55 % de jóvenes prefiere la democracia frente a cualquier alternativa. Lo cree, lo valora, lo defiende. Lo que no cree —y con razón— es en la manera en la que la política la administra.
