Salud: Un infarto nos recuerda las carencias del sector

Por: 

Francisco Pérez García

La muerte del congresista de Fuerza Popular, Hernando Guerra García activó las alertas sobre la situación del sistema de salud en el país. Se ha mencionado que el fenecido legislador no recibió la atención adecuada y que una posta médica cerrada a las 11:30 de la noche, en el distrito arequipeño La Punta de Bombón, fue una de las razones que causó su muerte tras sufrir -según la necropsia- un infarto al miocardio. 

Pero ¿Qué pasa en la región Arequipa? ¿Es en realidad su sistema de salud tan precario como se presenta en los medios? ¿La posta de La Punta de Bombón debía estar abierta a la hora en que el guardaespaldas y los amigos del ahora ex primer vicepresidente del Congreso lo llevaron para ser atendido tras sufrir una descompensación? 

Otra Mirada conversó con diversos especialistas y personal médico de la región Arequipa para entender un poco la estructura del sistema de salud en este departamento y en el resto del país, además de analizar lo que debe darse en el sector Salud para mejorar un sistema que nos afecta a todas y todos en el país. 

Los CLAS y el financiamiento del sector Salud en Arequipa

Para entender esta historia, debemos retroceder un poco en el tiempo hasta el mes de diciembre de 2021, cuando la entonces consejera regional Kimmerlee Keily Gutiérrez Canahuire, asumió el Gobierno Regional de Arequipa (GRA), tras el fallecimiento de su padre Walter Gutiérrez Cueva quien ascendió al cargo tras la detención del entonces gobernador Elmer Cáceres Llica, acusado de integrar la organización criminal “Los Hijos del Cóndor”. 

Kimmerlee Gutiérrez llegaba al cargo con serios cuestionamientos por su designación (en el gobierno de Yamila Osorio) como jefa de la oficina de Imagen Institucional en la Autoridad Autónoma de Majes, sin cumplir los requisitos para el cargo y cobrando sin problemas sus dietas como consejera regional. 

En abril de 2022 el GRA firmó un convenio con el Seguro Integral de Salud (SIS) por el cual cerca de 20 millones de soles destinados para el presupuesto de los Comités Locales de Administración de Salud (CLAS) pasarían a ser administrados por la Red de Salud Arequipa – Caylloma, dependiente de la Dirección Regional de Salud de Arequipa. 

Esta decisión generó el rechazo de los representantes de los CLAS pues señalaban que se les quitaría recursos para las compras, contratación de personal, pago de servicios y otros para los centros y postas médicas administrados por esta instancia. 

“La concentración de los fondos va a generar burocracia y el retraso de los procesos en perjuicio de los pacientes”, señaló en su momento José Del Carpio Márquez, dirigente de los CLAS. 

Pero ¿Qué son los CLAS y cuál es su función en el sistema de salud? El Comité Local de Administración de Salud es una asociación civil sin fines de lucro integrada por representantes de las comunidades locales, cuyo fin es administrar un puesto o centro de salud asegurando el servicio de salud para las personas. 

El año 2007 estas organizaciones fueron reconocidas por la Ley 29124 que establecía el proceso de cogestión de los CLAS en los establecimientos de salud en conjunto con el Ministerio de Salud y las Direcciones Regionales de Salud. 

Laura Altobelli es médica y Doctora en Salud Pública de la Universidad Jhon Hopkins de Estados Unidos y especialista en temas del sector. Respecto a la gestión conjunta de los CLAS y los entes del Estado, señala que “La Ley de Cogestión permite transferencias de fondos públicos y privados al primer nivel de atención para aumentar personal en regímenes del D.L. 728 y por servicios personales, medicamentos, insumos y otros gastos locales para la calidad de atención al público”.

Altobelli señala que, según las cifras del ministerio de Salud, actualmente existen sistemas de cogestión en 1,722 centros y puestos de salud, de los más 7 mil que existen en el país. 

Víctor Zamora, exministro de Salud, reconoce que hay iniciativas de CLAS que han funcionado en diversos lugares “han sido una experiencia innovadora y exitosa en la mayor parte de los casos, sin embargo, se han visto debilitados por la presión de gremios profesionales que reclamaban que los contratos no los haga la comunidad, sino el Estado y que éstos sean nombrados”. 

Para Zamora, esta decisión iba en contra de los CLAS pues los trabajadores al ser contratados por el Estado ya no le rendían cuentas a la administración local sino al ente rector que lo contrató. 

La nueva gestión regional en Arequipa, según señalan los representantes de los CLAS no parece querer cambiar el convenio firmado con el SIS por lo cual el presupuesto no es manejado por estos organismos. En abril del 2022, Del Carpio Márquez, representante de los CLAS aseguraba ante los medios que la propia Red de Salud manifestaba no tener la capacidad de manejar los recursos que iban a darle con el convenio. 

Entonces ¿Cómo andamos en la atención primaria en salud? 

Como decíamos al inicio de este informe, la muerte del congresista Guerra García ha vuelto a poner sobre el tapete la discusión de si nuestro sistema de salud es lo suficientemente adecuado, si alcanza para atender a la población, o si cubre con el mentado mensaje de la señora Boluarte que dijo ante la ONU que “el 99.9% de los peruanos tiene acceso a un seguro de salud”. 

Para la médica residente de la especialidad de Administración y Gestión en Salud en San Marcos, Maritza Ortiz, miembro del colectivo de la Plataforma por el derecho a la salud, la atención primaria en nuestro país “prácticamente no existe”, ella señala que se le llama así “a las actividades que realizan los establecimientos pequeños que no son hospitales, pero solo hacen atenciones recuperativas y algunas pocas incipientes actividades preventivas, mucho menos de promoción de la salud”.

Recuerda Ortiz que, en los establecimientos de salud de las zonas rurales, los puestos están cubiertos por personal de salud egresado que es “obligado a ir a esas zonas rurales para cumplir el requisito para ser especialista o trabajar en el Estado, sin continuidad, ni preparación para ello”. 

Al respecto, el exministro Zamora señala que en el caso del personal médico se prioriza muchas veces la contratación para los grandes hospitales regionales. “Se tienen recursos, pero se usan para contratar médicos y técnicos que van a los hospitales regionales y se desatiende a las postas o centros de salud”, recuerda. 

El centro de salud 1.4

Un dato vital para entender lo ocurrido la semana pasada en el distrito de La Punta del Bombón, es el relacionado a la categoría que poseen los centros de salud en nuestro país. 
En la atención primaria de salud, existen cuatro niveles para determinar el tipo de categoría que tienen las postas médicas y los centros de salud. “Son categorías que van de la 1.1. a la 1.4 donde esta última corresponde a los centros de salud con atención de 24 horas, donde se añade personal médico especializado, técnicos y equipos"., recuerda el exministro Víctor Zamora. 

La posta de La Punta de Bombón corresponde a un nivel 1.4 aunque el tema del horario de atención varió por una serie de razones. El médico internista y docente universitario Carlos Vizcarra, aclara que los horarios de atención de dicha posta “son de responsabilidad de la microrred correspondiente”. Es decir, es la red la que determina, de acuerdo a los activos y recursos los horarios en los que debe atender. Quizá va de la mano con el tema de un presupuesto que hoy le es esquivo a varias zonas de Arequipa por el convenio firmado por el GRA y el SIS.

Sobre ello, Laura Altobelli reitera que sin fondos el centro de salud de Punta de Bombón “ya no da mantenimiento a su ambulancia, ni paga al chófer ni muchas otras cosas y por ello no atiende 24 horas”.

Por eso, cuando los amigos del fallecido congresista llegaron a buscar atención al centro de salud, se encontraron con una puerta cerrada. 

“Con los recortes inexplicables del SIS, hubo un abandono en Punta de Bombón y en todo el nivel I de atención en Arequipa”, puntualiza Altobelli. 

Maritza Ortiz finaliza señalando “que la categorización de servicios de salud, pareciera que es una especie de descripción de carencias, porque en una realidad justa no se explica porque las personas de las ciudades tengan más derechos a la salud que las personas que viven en el campo o provincias en general”.

Para terminar… 

Pasada una semana del fallecimiento de Hernando Guerra García, nadie sabe si una atención rápida hubiera podido salvarlo. Diversos estudios señalan que 40% de víctimas de un infarto al miocardio fallecen a los pocos minutos de producido el ataque. Sin embargo, si vale la pena resaltar que, en nuestro país, queda mucho por atender en materia de salud y que la experiencia de los CLAS podría ser mejorada para fortalecer nuestro sistema, con la disposición adecuada de recursos, esto sumado a una lucha frontal contra la corrupción en el sector.