Ricardo Soberón
Estamos frente a un mundo de inflación, inseguridad alimentaria, ruptura de la cadena de suministros, crisis energética y franca competición. La economía internacional en el siglo XXI es altamente dependiente de ciertos productos minerales y combustibles, como ocurre con el Medio Oriente y Venezuela para el caso del petróleo, el denominado “triángulo del litio”.