Francisco Durand
Seguimos teniendo un modelo de acumulación más que de desarrollo. Este modelo está sostenido en la Constitución de 1993, que es concentradora de la riqueza gracias a que produce un escenario institucional, reforzado por la apertura del mercado y las privatizaciones, de empresas estatales y yacimientos, de altas ganancias, donde el principal derecho que se defiende es la propiedad privada, lo que beneficia a sus más grandes exponentes.