Ariela Ruiz-Caro
Trump sabe, y ha reconocido, que, si todos los estadounidenses votaran, no podría ganar la elección; ni él, ni ningún candidato republicano. Por eso lideró un operativo que consta de dos componentes: el primero, desprestigiar e instalar en la opinión pública la desconfianza en el proceso electoral. Y que las elecciones de 2020 están manipuladas, que habría fraude en el conteo de los votos emitidos por correo.