Hace unas semanas, denunciamos el grave desgobierno por el que viene atravesando la Universidad de San Marcos.

Esta situación se evidenció con las denuncias de fraude en la elección de los profesores representantes ante la Asamblea Universitaria. Lamentablemente, esta realidad también se observa en algunas facultades en medio de la elección de sus Decanos.
 
En este infodiario, presentamos la situación caótica por la que pasan la Facultad de Ciencias Económicas y la Facultad de Ciencias Sociales porque ciertos grupos vinculados al poder de turno quieren imponer a sus candidatos como decanos, haciendo un “by pass” al Consejo de Facultad y sin tomar en cuenta a los estudiantes.   
 
La treta del “decano interino”
La semana pasada, debió elegirse al nuevo Decano de la Facultad de Ciencias Económicas. Sin embargo, según informa La República, esta elección se vio frustrada luego de que el decano saliente, Víctor Giudice, suspendiera la sesión por “falta de quórum”. A continuación, se llevó a cabo un referéndum estudiantil, proceso que, aunque no está dentro de las normas universitarias, esta vez es utilizado como protesta ante la inacción del Consejo. El resultado de este proceso favoreció con el 88% de apoyo a la lista opositora “Academia y Desarrollo”, que encabeza el profesor y candidato Humberto Campodónico. Pero, para sorpresa de todos, en lugar de convocarse a la elección debida, según informa un comunicado, el rector Luís Izquierdo ha “encargado” el Decanato al Consejero más antiguo, profesor Urcisinio Cárdenas, quien en 15 días deberá convocar al Consejo para elegir al nuevo Decano.
 
En la Facultad de Ciencias Sociales, la historia es similar. En dos oportunidades se boicoteó la elección del decano en el Consejo de Facultad. Por esta razón, también se realizó un referéndum aunque sin consenso de las partes, donde la única lista participante fue la encabezada por el profesor y candidato Waldemar Espinoza, aliado del saliente y derrotado decano Bernandino Ramírez. Sin embargo, el último viernes 4 de junio, en las instalaciones del rectorado de la Universidad, un grupo minoritario de alumnos buscó mediante la violencia que se reconozca al profesor Espinoza como Decano evitando, así, que se realicen elecciones democráticas vía el Consejo de Facultad. Actualmente, el profesor Waldemar Espinoza es el decano “interino” y deberá convocar a una nueva elección también en 15 días.
 
¿Favoreciendo una posible intervención? 
Este total menosprecio por las normas y un generalizado ambiente de indignación que vive la comunidad universitaria sanmarquina estaría favoreciendo un escenario para propiciar mecanismos de intervención que ya, en la década de 1990, le hicieron mucho daño a la universidad pública. Asimismo, se quiere enquistar en esta casa de estudios un pensamiento único, una mezcla de mediocridad con radicalismo, que pretende manejar la universidad a su antojo.
 
Esperemos que el Congreso de la República, nuestra mayor autoridad representativa, se pronuncie al respecto para evitar, junto con los profesores y alumnos críticos al actual sistema de gobierno, que sigan ocurriendo este tipo de hechos que ensombrecen el rol tan importante que juega para nuestra democracia la Decana de América.