Cuidado con la boca de urna
Las últimas encuestas difundidas en los medios confirman que la diferencia entre el “Sí” y el “No” se acorta. La tendencia resulta beneficiosa para la opción del “No” y en las semanas que quedan este repunte podría terminar con la opción que defienden los promotores de una revocatoria a todas luces movilizada por intereses que nada tienen que ver con Lima, sino con los oscuros designios de ciertos personajes a quienes ya conocemos.
El empate técnico entre ambas opciones, sin embargo, debe ser visto con cuidado. Más allá de la perspectiva positiva para la opción del “No” es importante tener en cuenta los avatares propios de una campaña de este tipo. Hemos visto cómo en los últimos días, tal vez preocupados por este panorama, los defensores de la revocatoria han dejado de lado los argumentos y aparente serenidad iniciales para dar paso a una proliferación de insultos, denuncias sin sustento y el consecuente desprestigio de la campaña en general. Todo esto indica que no sólo desde el inicio de este afán revocador, sino hasta el mismo día de las elecciones el próximo 17 de marzo, hay que estar atentos.
Durante las elecciones, diversas organizaciones y encuestadoras realizan un despliegue de recursos significativo para brindar dos modalidades de resultados extraoficiales que indicarían una tendencia de los mismos el día de la votación. Por un lado, tenemos el caso de la Asociación Civil Transparencia, por ejemplo, que ha realizado durante diversos comicios el llamado “conteo rápido” que consiste en tomar una muestra de votos emitidos y realizar un recuento veloz de los mismos. Los resultados resultan extraoficiales, sin embargo consisten en una cifra cercana a lo que luego señalen las cifras oficiales.
En esta ocasión, Transparencia ha indicado que no realizará un conteo rápido para las elecciones del 17 de marzo debido a que se trata de un proceso particularmente complejo y, por ello, esperarán también los resultados preliminares que emita el Órgano Nacional de Procesos Electorales (ONPE). Saludamos esta decisión ya que nos parece responsable.
Sin embargo, llamó la atención que Manuel Torrado, director de la encuestadora Datum Internacional, confirmara que su compañía efectuaría un sondeo el mismo día de la revocatoria para conocer la tendencia. Este sondeo es conocido como “boca de urna” y consiste en una encuesta realizada a los electores al salir de sus centros de votación. Se trata, de un sondeo y sus resultados no sólo son extraoficiales, sino que en muchos casos, han sido bastante alejados de los oficiales.
Dicha boca de urna y alguna que pueda realizar otra empresa podrían deslegitimar los resultados preliminares que la ONPE anuncie para la mañana del día siguiente de efectuados los comicios. Asimismo generaría una expectativa ciudadana que en un contexto como el actual, no resultaría positiva.
En diversos países, los sondeos de boca de urna se encuentran prohibidos para cualquier tipo de elección con el fin de preservar la calma durante el día de los comicios y evitar desestabilizar el proceso. En un contexto como el propio, ¿qué podemos esperar de un resultado tan veloz?
Esperamos, por ello, que tanto Datum como otras encuestadoras que han realizado, en varias ocasiones, estos sondeos desistan de realizarlos en esta ocasión. Es fundamental esperar con paciencia los resultados preliminares del organismo pertinente ya que ello es lo responsable en aras de resguardar las cifras oficiales y el clima democrático. Solicitamos, por ello, evitar la deslegitimación de los resultados con cifras extraoficiales.
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