De acuerdo al INEI, el Perú tendrá 30 millones 475 mil habitantes en 2013. Si dividimos esta población entre 130 congresistas, cada mal llamado padre de la patria representa a 234 mil personas. Sin embargo, en Huánuco, cada congresista representa a 283 mil habitantes, en Puno a 278 mil compatriotas, en Junín a 266 mil coterráneos. En 13 departamentos, la representación parlamentaria es mayor a los 230 mil habitantes, mientras que en 19 departamentos es superior a las 200 mil personas.

¿Cuántos electores están registrados en Africa? 224 connacionales  ¿En Oceanía? 3,191 personas ¿Y cuántos votaron en 2011? Únicamente 77 en África y 1,460 en Oceanía. Inclusive en Europa, los registrados suman 229 mil peruanos, de los cuales votaron solamente 133 mil, pero lo que nadie precisa es que en la Unión Europea existen 27 estados miembros. En las 3 Américas, los registrados totalizan 489 mil, de los cuales votaron 256 mil -64% de los que votaron en 2011-- pero lo que nadie recuerda es que en América del Norte, Central y del Sur existen 35 países.

¿Puede existir un congresista para 77 personas?  ¿O ser elegido residiendo en Nueva Zelanda pero representando a un peruano que vive en China? Un Proyecto de Ley habla de 2 representantes para Europa, es decir, de un congresista que viva en Paris y que represente a 67 mil votantes. También se dice que las 3 Américas deberían tener 3 representantes, es decir, un congresista que defienda a 86 mil peruanos, cuando en Huancavelica, el departamento más pobre del Perú, la representación parlamentaria es de 244 mil connacionales por congresista. Además, ¿qué nos haríamos entonces con el Parlatino, el Parlamento Andino y el Parlamento Amazónico?

Las cifras no dan. Pero la lógica tampoco. Un congresista en Chile defendiendo a peruanos en Colombia, ¿cómo los defiende? ¿Qué causas protege? ¿Y cómo lo hace? ¿Por correo electrónico? Y el Proyecto de Ley que plantea un representante para los peruanos que viven en África, Asia y Oceanía, imaginemos que el congresista vive en Japón y que la queja se encuentre en Sudáfrica, ¿no creen que sería más útil dirigirse al embajador peruano en Johannesburgo?

Porque estos congresistas para los peruanos en el exterior corren el riesgo de convertirse en unos super embajadores, con asiento en el Perú, y por lo tanto con inmunidad, pero con representación en decenas de países, en donde su trabajo podría debilitar al de la Cancillería. ¿Y si un congresista robacable en Suecia? ¿O lava pies en Italia? ¿Cómo se dañan nuestras relaciones con estos países? Porque un diplomático es educado y formado para representarnos en el exterior, mientras que estos super cónsules no.

En todo caso, no deja de ser extraño que algunos de los que promueven esta iniciativa posean doble nacionalidad, hayan jurado defender la bandera norteamericana, hagan aportes a las campañas de presidentes foráneos o digan representar a peruanos fuera cuando hace más de 3 años que no viajan al extranjero. Pero ¿qué dicen los peruanos en el exterior? De acuerdo a los Resultados de la Primera Encuesta Mundial a la Comunidad Peruana en el Exterior publicado recientemente por el Ministerio de Relaciones Exteriores:

El 83.7% de los entrevistados considera que el Consulado peruano puede atender sus necesidades.

El 67.1% de los entrevistados mencionó contar con DNI peruano pero con domicilio en el país de residencia.

El 49.3% señaló ser residente permanente, 16.4% haber adquirido la ciudadanía del país que los acoge y 11.1% contar con visa de trabajo en el extranjero.

El 50% lleva más de 8 años en el país donde viven. La mediana de años más alta está en Asia con 13 años fuera del país.

El 41.2% regresaría al Perú pero por períodos o meses y el 17.8% no retornaría al Perú jamás. Los peruanos con edades que van de 18 a 39 años presentan las proporciones más representativas de los peruanos que no regresarían.

Los que pertenecen a alguna organización de peruanos en el exterior constituyen el 8.6% del total de compatriotas en el extranjero. Entonces, sus presidentes ¿a quiénes representan?

Con estos resultados, la pregunta que surge es si necesitamos a un congresista más ¿para un peruano en Amazonas o para un peruano en Nueva York?

No olviden que cada despacho congresal le cuesta al contribuyente peruano acá alrededor de S/. 3.8 millones por año, casi S/. 19 millones en 5 años.

(*) Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de la República