El inicio de operaciones de la nueva Refinería de Talara es una obra de infraestructura de vital importancia porque permitirá producir combustibles con altos estándares ambientales en beneficio de todos. La capacidad productiva generada por el nuevo proyecto de desarrollo de la refinería de Talara subirá de 50 a 95 mil barriles por día.

Es el resultado de la inversión a la fecha de 5,083 millones de dólares destinado a la modernización de la planta de refinado que ahora podrá usar técnicas de punta para valorizar el petróleo crudo pesado y aumentar el valor agregado en los ítems del catálogo de ventas.

La calidad del producto refinado se eleva de modo significativo puesto que la emisión caerá de 3,000 a 50 partes por millón de azufre en el Diesel y las gasolinas. El horizonte de producción le permitirá cumplir con el objetivo de operar con la norma EURO 6 y en dos años, estar en suficiencia completa en el mercado de carburantes. 

Además, es relevante el impacto en la salud respiratoria de la población por la mejora de la calidad de aire, un ahorro del orden de 116 millones de dólares.

Nótese que la etapa de prueba en marcha es un shock de nuevas tecnologías ingenieriles hasta que todo el complejo trabaje a plena carga. Se requiere activar un ingente número de instrumentos, circuitos, tableros de control, interconexiones internas, sistemas electrónicos, Manómetros, bombas, calderas, tubos, sistemas de alimentación, en fin, la instrumentación técnica indispensable. También la gestión de operaciones, inventarios, insumos productivos y medidas de calidad de las operaciones y procesos unitarios a cargo de especialistas peruanos convenientemente asesorados, ingenieros de petróleo, petroquímicos, industriales, mecánicos, mecánicos, informáticos, sistemas, ciberseguridad. También hay que ir afinando el planeamiento, la programación, la dotación sincronizada de recursos de la ciencia del Planeamiento y control de producción, puesto que es bien conocido que el negocio de los hidrocarburos se apoya en una visión de circuito que empieza con el recurso natural, el hidrocarburo, identificado por geólogos y otros ingenieros en las fases que van de la prospección a la exploración, extracción, transporte y acondicionamiento para su conversión en productos finales. 

Nótese, también que otros criterios como el económico, la seguridad del territorio, los efectos en la población, estos y otros factores se convierten en costos fijos y variables que enfrentan las oscilaciones del precio de mercado del barril del petróleo.

Al respecto, la capacidad competitiva aumenta al importar el crudo de los países excedentarios, refinando en condiciones de alta productividad y abasteciendo a los consumidores intermedios y las cadenas de consumo final, tal como lo hacen la gran mayoría de los países del mundo. 

Una revisión del flujo de financiamiento del proyecto de modernización productiva muestra que los flujos propios y el endeudamiento son suficientes para lograr el objetivo. Sin embargo, el alza excepcional del precio del barril del petróleo (WTI y Brent), de continuar agregaría un saldo adicional a los ingresos resineros de la firma, acortando el plazo de repago de la operación modernizadora. 

Al respecto la solución al problema del plazo de contratación de la auditoría externa levantara las observaciones que se han formulado en los mercados de bonos. Contando con un nuevo directorio integrado por profesionales de carácter especializado y un consenso en la opinión pública sobre los beneficios esperados del proyecto, la recuperación de la calificación financiera no debiera tardar. Solo cabe expresarle nuestro aliento y éxito al ingeniero CIP Humberto Campodónico y su calificado equipo de dirección.