La antipolítica como aquella actitud que niega públicamente a la actividad política, pero se hace de la vista gorda respecto al ejercicio escondido de la misma, sigue vigente en nuestra sociedad.

Este cáncer, que nace con la crisis de los partidos y la ineficacia de los políticos a fines de la década de 1980, afirmándose con el fujimorismo, mantiene a la abrumadora mayoría de peruanos con una gran desconfianza frente a este ámbito fundamental donde se toman las decisiones que tienen que ver con nuestro futuro.
Esto se refleja con la encuesta sobre corrupción realizada por el Instituto de Opinión Pública (IOP) de la Pontificia Universidad Católica del Perú en Lima metropolitana, que da luces sobre la percepción ciudadana respecto a la corrupción en nuestras instituciones¹ y evidencia la desconfianza en aumento hacia las instituciones políticas tales como el Congreso, los partidos políticos y el gobierno.
En la encuesta del IOP un 78% considera al Congreso algo corrupto/muy corrupto. Un 75% considera a los partidos políticos algo corruptos/muy corruptos y un 67% al gobierno algo corrupto/muy corrupto. Si comparamos estas cifras con las del Latinobarómetro del año 2008 notamos que el Perú es el país que menos confía en el Congreso (solo un 12% confía algo/mucho), en los partidos políticos (un 11% confía mucho/algo) y en el gobierno (un 15% confía algo/mucho). En esa misma línea, el Latinobarómetro 2008 presenta al Perú como el país  menos optimista respecto a la reducción de la corrupción pues solo el 17% cree en esta.
Pero así como alarma la percepción ciudadana sobre la corrupción en las instituciones políticas, lo hace también la percepción sobre el carácter corruptible de las mismas. De esta manera, un 78% de limeños considera que las personas “se corrompen cuando entran en política”². En la misma línea, el Latinobarómetro 2008 muestra a un 63% de peruanos que considera que existe más corrupción en los políticos que en el resto de la sociedad.
Estos resultados suenan como una alarma para todo el país ya que sin una ciudadanía que trascienda sus prejuicios antipolíticos será muy difícil enfrentar la crisis de la política y renovar a la misma para efectuar los cambios que el Perú necesita.
¿Serán nuestros políticos conscientes de la contundencia de estos datos?

¹ Instituto de Opinión Pública PUCP 3 de setiembre
http://www.pucp.edu.pe/iop/files/sondeo_42.pdf
² El Comercio 07/09/2009
 http://www.elcomercio.com.pe/impresa/notas/78-cree-que-personas-se-corrompen-al-entrar-politica/20090907/338702