Laura Arroyo Gárate
Hay un detalle que marca una particularidad importante en Chile. Una diferencia clave: la redacción de una nueva constitución que ponga punto final a la constitución de la dictadura pinochetista está en marcha. Y está en marcha porque la ciudadanía chilena consiguió que así fuera. Está en marcha y en proceso porque los y las chilenas votaron mayoritariamente por una nueva Constitución democrática.