En la última encuesta realizada por la Universidad de Lima, en Lima Metropolitana, podemos ver que Alex Kouri lidera las preferencias electorales con un 32.3%. Este 32.3% resulta vergonzoso para todos aquellos que priorizamos los escándalos de corrupción por sobre supuestas “obras” (llenas de irregularidades y buen marketing).

Acá va una ayuda memoria: ¿quién es Alex Kouri?
Alex, el visitador
Alex Kouri visitó al ex asesor Vladimiro Montesinos en la conocida salita del SIN, nada menos que ocho veces. Sus disculpas con respecto a estas ocho reuniones no han sido claras y se han limitado al pedido por “comprender el contexto político de entonces”. Como afirma Antonio Zapata¹, lo que debemos recordar es que Alex Kouri se reunió con Vladimiro Montesinos con objetivos muy definidos como ver el caso judicial de un familiar suyo o para coordinar el copamiento de alcaldías limeñas y boicotear así a Alberto Andrade. Por otro lado, propuso una Ley para evitar con ella la postulación de Andrade a la Presidencia el 2000 y neutralizar a la oposición en el contexto electoral del mismo año. Como vemos, se trata de un personaje con el cual la mafia fujimontesinista al menos complotaba para silenciar a la oposición en pos de una re-reelección de Alberto Fujimori.
Finalmente, en una de sus ocho reuniones en la salita del SIN, Kouri discutió con Montesinos el diseño de la Vía Expresa del Callao. Este último caso es mucho más negro de lo que parece.
Un ilegal peaje de 18 cuadras
Si el apoyo al candidato Alex Kouri se basa en las obras realizadas en el Callao, cabe mencionar que la más sonada de todas tiene visos de corrupción tremendos. La Vía Expresa del Callao fue, desde su inauguración, un dolor de cabeza para los conductores que se dieron con la sorpresa de un peaje cobrado por tan solo 18 cuadras. Pero esto no es todo. 
Luego de aproximadamente seis meses en que Alex Kouri ha intentado, vanamente, demostrar que no ha cometido ninguna irregularidad en la construcción de esta obra, en diciembre del año pasado el Segundo Juzgado Anticorrupción le ha abierto una instrucción y se le está procesando por dos delitos: colusión desleal y negociación incompatible. El primero de ellos hace alusión a las facilidades que como Presidente Regional, Alex Kouri, brindó a la empresa CONVIAL y que, además, está vinculada a la familia política del entonces Alcalde del Callao. 
El delito de negociación incompatible radica en el hecho de que la Municipalidad del Callao no tenía facultades para otorgar en concesión una vía nacional como era el caso. Ello le correspondía al Ministerio de Transportes. He aquí el detalle por el cual Kouri, visitó en alguna ocasión al ex asesor Vladimiro Montesinos. Kouri, propuso a Montesinos que se modifique una norma que le permita transformar una vía urbana en una nacional para que pudiera, así, cobrar peaje por transitarla. 
Queda claro, entonces que este candidato tiene un proceso abierto y no puede salir del país sin autorización de un juez; sin embargo, es el candidato preferido en las encuestas para la Alcaldía de Lima Metropolitana. Parece que estas denuncias de corrupción han sido olvidadas por el electorado. 
Pero, además, el lunes pasado, el Congresista Juan Carlos Eguren (PPC), con cifras en mano, confirmó que el Presidente Regional del Callao solo ha ejecutado el 47.4% del presupuesto asignado para el año pasado. De este modo, el gobierno regional del Callao se encuentra en el puesto 23 de 26 regiones. ¿Qué pasó con el supuesto excelente gestor público? Con las cifras se demuestra que Kouri no tiene capacidad de gasto y ello demuestra ineficiencia.
Claramente, Alex Kouri está vinculado con la red que tejieron Fujimori y Montesinos y es preciso resaltar que con Kouri en la Alcaldía de Lima se beneficia la posible candidatura de la hija del dictador Alberto Fujimori. Pero además, Alex Kouri ha sido también un personaje vinculado con el actual Presidente de la República, quien no pierde la oportunidad de aparecer en la foto de cualquier inauguración realizada por el Presidente Regional. En este sentido, la relación Kouri-García ha sido también evidente. Este candidato es, pues, un sospechoso de marca mayor cuya candidatura debiera considerarse una amenaza y no una posibilidad.