Declaración del embajador de Cuba en Perú, Sergio González González

Cuba fue elegida para integrar el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, órgano compuesto por 47 Estados miembros, responsables de la promoción y protección de todos los derechos humanos en el mundo.

Las desesperadas presiones, manipulaciones y chantajes de Estados Unidos para impedirlo terminaron en rotundo fiasco. Mi país ocupa así, por quinta ocasión, desde el 13 de octubre, un escaño en el CODEHU, después de obtener el voto favorable de 170 de los 191 países que participaron en la votación.

Hasta el Perú llegaron los ecos de una campaña que apenas pudo levantar vuelo. 

Pareciera que no, pero algo ha cambiado en América Latina, después de todo. O más bien, después del Canciller Porras Barrenechea, a quien imagino haciéndonos un guiño desde la eternidad y diciéndonos sobre quienes nos atacan: “así no juega Perú”.

El Perú había comprometido el voto desde hacía largos meses y, sin dudas, honró su palabra, a pesar del bullying que el emporio mediático monopólico de El Comercio y la letanía del coro que desfachatada o veladamente apoya la política agresiva de los EEUU contra Cuba practicaron.

Agradezco a la cancillería y al gobierno peruanos por su posición serena, juiciosa, profesional y apegada al espíritu de independencia que sembró Porras hace 60 años.
Durante el mandato como miembro del Consejo (2021-2023), Cuba mantendrá su posición ética de favorecer el diálogo y la cooperación frente a los enfoques punitivos y la selectividad.

Los 170 votos a favor de Cuba constituyen el 88% de las Naciones Unidas. Cada cual está en el derecho de sostener sus posiciones y, si se quiere colocar en la del grupo del 12%, debemos respetarlo, mientras que no nos traten de hacer creer la machacona ficción de que este es la “comunidad internacional”.

Lo inadmisible es que, encima de echarnos la pataleta trumpiana, se pretenda reducir a estos 170 países a la condición de “cómplices” de las supuestas violaciones a los derechos humanos en Cuba. La comunidad internacional, la verdadera, y el gobierno del Perú merecen respeto.