Memoria Marca Perú

Se acaba de inaugurar de forma no oficial el Lugar de la Memoria sin pena ni gloria. 

Se acaba de inaugurar de forma no oficial el Lugar de la Memoria sin pena ni gloria. Ya desde que se anunció el lugar de su construcción (cerca del mar de Miraflores) y el nombre que llevaría, Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la Inclusión Social, diversas interrogantes saltaron a la vista. ¿Por qué en una zona nada democrática como Miraflores? ¿Tolerancia con qué? ¿Con los crímenes cometidos por Sendero Luminoso y las fuerzas del Estado? Y claro, la palabra inclusión social se interpretaba como el intento del gobierno de Ollanta Humala para colgarse de este proyecto que iba a ser construido gracias a la cooperación extranjera y una donación del gobierno alemán.

Esta primera parte de la inauguración tiene como plato de fondo un festival de música, teatro, exhibición fotográfica y un conversatorio. Buenas intenciones que, sin embargo, maquillan el tema de fondo: ¿Cuál será la historia que cuente el Lugar de la Memoria sobre la violencia que vivió el Perú entre 1980 y 2000? ¿Cuál es el espacio que se ha pensado para los verdaderos protagonistas: las víctimas del conflicto? ¿Se considerará las conclusiones mostradas por la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) o se intentará reescribir la historia como lo vienen haciendo algunos adalides de la derecha más conservadora del país? 

El presidente de la Comisión de Alto Nivel del Lugar de la Memoria, Diego García Sayán, declaró que el espacio no presentará cifras del número de víctimas, pues será “algo que busque llevar a la reflexión e inducir a los sentimientos frente a esa tragedia que vivió el Perú". ¿Por qué este afán de ocultar las cifras dadas por la CVR, que estableció que el 75% de las víctimas eran quechuahablantes? ¿Por qué hacerle el juego al fujimorismo, los principales críticos de la CVR? No nos sorprendamos, entonces, que las responsabilidades del Estado peruano sean disfrazadas, lo cual le harían un daño profundo al país.

¿Por qué temerle a un espacio de memoria real sobre lo que vivió el país durante dos décadas? En palabras de Salomón Lerner Febres, ex presidente de la CVR, en el Perú existiría cierta cultura autoritaria que ha hallado en la reflexión crítica que proviene de la memoria una suerte de amenaza no sólo a sus intereses concretos –entre los que se incluye la defensa de la impunidad—sino a su propia visión del mundo: un mundo jerárquico, excluyente, que no admite más movilidad que la que nace de la acumulación de riquezas. Estos intereses, una vez más, se estarían aliando para convertir el Lugar de la Memoria en un espacio donde la memoria se desvirtué con actividades culturales quitándole todo “ruido” político.

Así, el gobierno intenta construir una memoria sin verdad sobre lo que ocurrió el país, pues no se quiere hablar de responsabilidades políticas y, en consecuencia, tampoco de justicia. El camino de la reconciliación es cada día más lejano, pues sin memoria, justicia y reparación a las víctimas, no es posible la reconciliación del país. 

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta se hace para comprobar que es usted es o no una persona real e impedir el envío automatizado de mensajes basura.
Image CAPTCHA
Enter the characters shown in the image.