Nicolás Lynch
El efecto corrosivo del escándalo sobre la hegemonía ideológica ha tenido un salvavidas con la cuarentena que no sólo confina personas, sino que también genera inmejorables condiciones para profundizar la cuarentena de ideas que la derecha neoliberal logró en los años y las décadas anteriores y que hoy existe el claro peligro que se generalice.